EL INSTINTO CREADOR
Emilia
Vásquez, bogotana, profesora, escritora prolífica y amiga de esta casa
editorial, presenta hoy en Idiota Inútil,
uno de sus poemas más ricos y generosos, un verso de aquellos que nos ayudan a
despertar de la pesadilla cotidiana, de la tragedia que parece comer y vomitar
su carga de horror sobre las mentes y sueños de quienes habitamos un mundo
hastiado de tanta intolerancia.
A
Emilia y su obra las caracterizan la profundidad de conceptos, su alegría
realista, sus ganas de contar una versión propia de este cuento al que llamamos
vida. Ama profundamente las letras, lo que ellas brindan, las barreras que destruyen cuando los días
carecen de sol. El instinto creador que
no se doblega ante las circunstancias, debería ser el lema que resume el
brillante ejercicio intelectual de esta joven. “La literatura es siempre una
expedición a la verdad,” dijo Kafka y eso en la existencia de nuestra invitada
parece ser axioma.
Sin
más preámbulos los dejamos con “Blanca Paloma”, una muestra del talento y la
entereza de esta creadora que lucha y seguirá luchando por tener voz propia en
un mundo que se hunde en un mar de confusiones.
BLANCA PALOMA
Orgullosa e
indolente,
se posó La Muerte
sobre su blanca figura
A metralla y bombas
le arrancó sus alas
cosió su pico con
hilos de indiferencia
con suave hipocresía
extirpó sus ojos
Libertad, Igualdad y
Fraternidad se bañaron en su sangre
¡Inocente! ¡Víctima
de ambiciones!
Sin misericordia,
fueron sus plumas arrancadas
para adornar la
vanidad de falsos ideales
Con nostalgia
recordábamos como rauda rompía el viento
Los que antes, bajo
su dócil ala descansábamos;
ahora sobre su tumba
devoramos nuestros hijos
¡Día sin luz! ¡Eterno
dolor! Es su vuelo ausente
Más fuerte el machete
que el calor de sus polluelos
No bastaron sus
agudos chillidos
para que la angustia
de volver la hubiera liberado
esta vez no hubo
magia… fue real…
Buitres encontraron
sus polluelos
Alimentados con
resentimiento
Y bajo desperdicios
abrigados
Aún esperan que Alguien
les enseñe a volar