PUNTO DÉBIL
POR: CAMILO ETNA
Una
ojiva de plata
Disparada
con milimetría
Al
centro de las entrañas
Ciega
la voluntad
Nauseabunda
y altiva
De
la carne hastiada,
Pero
lo único capaz
De
acabar con la esencia
Del
lobo – hombre
Es
la puñalada
A
traición del amor (bueno o malo)
Resguardado
en la muerte
No
necesita pensar
En
el qué dirán, en los riesgos
O
su letal inocencia.
Entierra
a sus secuaces
Justo
al lado de las cenizas
De
los libros que prorrogan
El
hechizo congénito
De su herejía.
Nada
detiene el juego suicida.
Es
más fácil soñar engaños
Que
humillarse realizando
Cálculos
que demuestren la ineptitud.
Descubrir
el talón, el flanco
Sin
blindaje de la coraza,
Suciedad
encerrada por fuegos
Primitivos
que tienen nombre e intención.
Pide
a gritos ser eliminado
En
la catarsis, desnudo
Mientras
se retuerce
Entre
celosas quimeras.
El
monstruo descubre su rostro
Cuando
la tragedia labrada
En
los glóbulos sanguíneos
Empieza
a comérselo,
Cuando
se vuelve sol,
Agua
que abre vetas
En
la piedra,
Cuando
lucha, violencia,
Enfermedad
y ambición
Terminan
siendo nubes de tormenta
Expulsadas
a patadas
Del
paraíso y sus mentiras.
