Páginas

martes, 23 de octubre de 2012

"MOTAS MARIÑO" - LA INDÓMITA LUZ DE UN ICONO...


Aura Janneth Mariño, “Motas”, como la conocemos sus entrañables, además de escribir, ser madre, trabajar compulsivamente y multiplicarse por trescientos cuando de reír a carcajadas se trata, está de plácemes. Una vez más asistió a un espectáculo de Charly García. La cita tuvo lugar en el parque Simón Bolívar de Bogotá, en el marco de la más reciente edición de Rock al Parque.

 Y es que “Motas”, adora al viejo gaucho, idolatra su música y reconoce los aportes que el tipo le ha hecho a la música Latinoamericana. Es tanta su pasión, que le dio para escribir un libro: “La indómita Luz”, que se encuentra en proceso de corrección y será lanzado a finales de agosto de forma digital.

IDIOTA INÚTIL, la contactó para que nos dé sus impresiones acerca de este hombre que le cambió la fisonomía al rock de esta parte del mundo,  nos acerque al talento del creador musical, más que a sus escándalos y nos cuente sobre su trabajo literario al respecto. A continuación el diálogo con la carismática “Motas”, a quien de antemano le agradecemos su deferencia con la revista y este redactor:

¿Cuál fue el detalle que hizo “clic” en ti para que te enamoraras de la música de Charly García, Motas?
Conocí a Charly, mientras veía una película, “la noche de los lápices” (la verdad no sé qué pensaban mis primos cuando nos dejaron verla en un betamax cuando yo tenía apenas 10 años), en uno de esos instantes dolorosos de la película escuche “Rasguña las piedras”, fue entonces cuando mi enamoramiento musical por Charly nació. Luego de varios años, la entrada a la  adolescencia y “el rock en español”  hicieron que ese lazo se hiciera más fuerte, además el modo tan particular de interpretar su desacuerdo con las instituciones, me fascino. 

¿El gusto es sólo musical o también te gusta el tipo?
Totalmente musical, creo que no soy su tipo, así que para que me hago ilusiones. Ahora, desde mi punto de vista de admiradora, que es a donde básicamente va el libro que estoy trabajando, creo que su genialidad como compositor, músico e intérprete me tiene atrapada; aunque debo admitir que indiscreciones que revela de su vida y sus inicios en la música clásica son “especiales”.  Por ejemplo él cuenta que a los 4 años inicia con una maestra de música clásica muy conservadora y católica extremista. Le leía mucho sobre los grande músicos,  para enseñarle que había que sufrir un poco si quería llegar a ser el mejor, pero para este Charly niño, la moraleja fue que con el dolor viene la epifanía, así que decide antes de hacer una presentación lastimarse secretamente y aclaro de manera moderada antes de un concierto (de música clásica que era lo que hacía en ese entonces), pero con el tiempo el mismo se da cuenta que no necesariamente lo uno  lleva a lo otro.



Cinco grandes canciones del “loco”.
Son tantas, en este momento se me ocurren las siguientes, con la venia de todos los amantes de Charly:
·        Rasguña las piedras.
·        Confesiones de invierno.
·        Cuando comenzamos a nacer.
·        Canción para mi muerte.
·        Yo no quiero volverme tan loco.

Debo agregar que me encanta: Deberías saber por qué...

La mejor época de Charly, según tu parecer: ¿Sui Generis, Serú Girán, su etapa de solista?
Dentro del trabajo que estoy realizando y el cual esperamos presentar pronto, la etapa de Sui fue la que catapulto a Charly, es más, hoy en día no hay presentación donde no se pidan clásicos de Sui Generis, y para mi desde el punto de vista de admiradora, es la mejor época que ha tenido, sin dejar de lado que Serú y su época como solista han marcado a muchas generaciones.

Y es que la historia que encierra los primeros pasos de Sui para grabar es muy interesante: después de tocar muchas puertas con diferentes productores que trataron de timarlos, de esquivar a  otros empresarios que cuando ya tenían listo todo el contrato les incluían que debían limpiar las oficinas del productor, conocen a Jorge Alvarez (Quien publicaba Mafalda entre otras cosas).  Que los termina contratando y pese a que les paga menos de lo acordado, los guía bastante para sacar al mercado este producto que es Sui Generis. Además, según Charly, Alvarez ha sido el único productor que lo entendió de verdad.

Charly, ha hecho música con los mejores: Fito Páez, Calamaro, Andrea Echeverry, Spinetta, Nito Mestre, Fabiana Cantilo, “Cachorro” López, entre otros. ¿Eso lo catapulta como el músico más importante de los últimos cuarenta años en Latinoamérica o lo ratifica como un afortunado con buenos amigos?
Yo diría que es el mejor y el padre de un movimiento musical latinoamericano que ha querido dejar un legado entre sus amigos.

¿Cuál es el punto que diferencia el libro que preparas sobre Charly, de las demás cosas que se han escrito sobre él?
Este libro es realizado desde el punto de vista de un seguidor y fanático de Charly García, y como todos los fieles seguidores, no quiero juzgar, ni opinar sobre sus métodos o su vida, simplemente lo muestro como figura, como intérprete, testifico el sentimiento de un hombre apasionado y rebelde.

¿Cuánto llevas en el “cuento” literario?
Varios años, pero es la primera vez que me decido a publicar un trabajo.

¿Cómo complementas el amor por la música de Charly, con quién lo comparas, por lo menos?
Uno siempre tiene un maestro al que recuerda con cariño, yo veo eso en Charly, su vida, su pasión por la música, su posición política, su locura.

¿Charly es el epítome del IDIOTA INÚTIL?
Yo diría que sí, él ha forjado su vida basado por los caminos que su consciencia lo hace transitar.

¿Si no fuera Charly, quién en tu universo musical?
Mi universo musical tiene muchos habitantes, a nivel latinoamericano yo diría que los más cercanos son Café Tacuba, por ejemplo, su música, la creación, la interpretación.  Son excelentes y el mensaje al pueblo latino es tácito en muchas de sus composiciones.

¿Sobre quién o qué planeas escribir en el futuro próximo?
Estamos planeando con un grupo de amigos y siguiendo la línea musical, escribir sobre la influencia del rock latinoamericano en Colombia; queremos abarcar varias generaciones, pero con la visión de las personas que consumen esta calidad musical, queremos rescatar sus opiniones, su crecimiento, es decir, la influencia que ha tenido el rock desde sus inicios latinoamericanos para nosotros. Tenemos la fortuna de conocer varios amigos que han crecido en este ambiente y sabemos que podemos conocer más y enriquecer de esta manera nuestro trabajo.

“Motas”, un saludo para los lectores de la revista, por favor.

Agradezco su invitación  y más que cualquier cosa, el empeño en apoyar escritores y personas que quieren presentar y compartir sus diferentes géneros artísticos. Espero estar compartiendo pronto el lanzamiento del libro con ustedes.